IX Congreso General de Historia de Navarra. 2018

CRÓNICA

Una tan sólo unos escasos días, del 12 al 14 de septiembre, ha tenido lugar en IX Congreso General de Historia de Navarra, organizado por la Sociedad de Estudios Históricos de Navarra (SEHN). Del miércoles al viernes inclusive, mañana y tarde, se han reunido un buen número de investigadores en el Museo de Navarra, que siempre acoge con generosidad a dicha Sociedad.

Si en sus salones se han podido saludar los ya conocidos, también se han saludado los hasta entonces desconocidos, formando una comunidad de gente dedicada profesionalmente al estudio de la Historia.

El tema general ha sido: “Viejos y nuevos espacios de frontera / Mugako espacio zahar eta berriak”. Es un tema sugerente que admite múltiples perspectivas, desde la frontera espacial a la mental y psicológica, desde la frontera de costumbres materiales a la cultural… fronteras que cambian con el tiempo, la vida y el esfuerzo de sus protagonistas.

Además, este año 2018 tiene una significación especial para la SEHN, porque esta Sociedad celebra los 30 años de su nacimiento. Aún recuerdo con entusiasmo aquel Ier Congreso celebrado en 1986, una de cuyas conclusiones generales fue establecer una sociedad dedicada a estudio y divulgación de la historia de Navarra. Desde entonces los hay que nunca han faltado a la cita y otros se han ido sumando con entusiasmo. 

Lo visto como necesidad, se hizo, y desde dicha fecha y cada cuatro años, se ha celebrado un Congreso General que abarca desde la prehistoria hasta la actualidad, pues la historia de Navarra es mucho más extensa que los s. XVIII-XX. 

El comité científico formado por diez conocidos historiadores, ha trabajado junto al comité organizador, dirigido por la Dra. Doña Pilar Andueza Unanua, la secretaria Dra. Maite Díaz Francés y el tesorero Don Julio Rivas Sola. Sin los trabajos de organización, que nunca son debidamente valorados, este Congreso, como los ocho anteriores, hubiera sido imposible.

Como novedad, se han omitido las extensas  ponencias de Área, y se ha reducido todas las intervenciones a veinte minutos, en los que cada investigador expone sus sugerencias, fuentes y tesis que luego el auditorio encontrará desarrolladas en la publicación de las Actas. Esta flexibilidad permite también un mayor número de momentos para el coloquio. 
Así mismo, se ha ofrecido una simultaneidad de aportaciones en tres salas distintas: el espacioso salón de actos, la biblioteca en torno a una gran mesa redonda, y la galería, llena de luz. Cada una de las salas y variando el día, tuvo un coordinador procedente de distintas universidades: la Universidad  de Navarra, la Universidad Pública de Navarra, la UNED, la Universidad de País Vasco y la Universidad de la Rioja. 
Los intervinientes han tenido las procedencias más dispares, con la única condición de que su investigación verse sobre Navarra, sus viejos espacios en el tiempo y otros nuevos de frontera. 
Dos días las sesiones terminaron con un documental de filmoteca comentado con intensidad.

El miércoles las sesiones versaron sobre el Pirineo occidental como lugar de paso y frontera, las fronteras lingüísticas de ayer y hoy, y la impronta de Roma en el solar que más tarde será el Reino de Navarra. El documental “Pax Avant”, expuesto por su realizador Domingo Moreno, fue comentado por Antonio Jesús Gorria. Se trataba del tributo de las tres vacas, que se sigue realizando desde tiempo inmemorial.

El jueves se analizó la frontera invisible de lo femenino, las fronteras imaginadas, así como los Pirineos occidentales en la modernidad. Por una imposibilidad física no tuvo lugar la visita guiada por Pamplona como ciudad amurallada en la frontera. Deseamos al dr. Eduardo Oslé su pronta recuperación.

El viernes se profundizó sobre el patrimonio histórico y cultural, la fenomenología del paisaje de frontera que comprende su expansión en diversos lugares de la América hispana, y las viejas y nuevas instituciones del Reino de Navarra o bien  posteriores. El documental “Les hirondelles (las golondrinas)…” sobre la aventura migratoria de mujeres navarro aragonesas en Zuberoa (Francia) fue muy sugerente.

Agradecemos a la SEHN la cita estos días de Congreso. También la publicación de las Actas en las que se precisará de manera demostrativa mucho de lo que se adelantó y sugirió en las sesiones. 
Sabemos que la SEHN no se agota con el Congreso cada cuatro años, sino que cada año académico ofrece una pléyade de actividades ilusionantes y novedosas. Convoca a todos y les ofrece la ocasión de profundizar las más variadas materias.

Si me lo permiten, la edad de los congresistas era algo avanzada quizás porque las nuevas generaciones de universitarios no se decantan masivamente por los estudios de Historia. La sociedad entera se lamentará de ello porque no pueden existir vacíos, mientras que existe el peligro de que personas no preparadas intenten dar respuesta, aún con la mejor buena fe, a los interrogantes que ofrece el pasado. 

A pesar de ello creo que la sociedad seguirá teniendo historiadores de profesión, pequeños héroes en nuestra sociedad materialista y tendente a evadirse con utopías, porque siempre hay amigos de la verdad del pasado por vocación. Sin embargo, hay que reconocer el voluntarismo de quienes no trabajan en las universidades, y la reducción del alumnado universitario.
Confiamos que si bien la Economía como ciencia estudia la reducción o expansión de la frontera de posibilidades de producción (FPP), en el tema que nos ocupa, donde intervienen los particulares con vocación de historiador, las asociaciones, los mecenas, las universidades, los colegios e institutos, y la administración pública, no se permitirá que la cantera de historiadores en potencia se pierda. Recuerdo que en 1986 dicha cantera era maravillosa y, contrastándola con la actualidad, hoy veo que discurre  menguada. Por eso, es muy de agradecer que la SEHN colabore eficazmente para expandir la ciencia histórica con entusiasmo y como vocación.

Gaurko aski degu: agur eta urengo arte.

José Fermín Garralda Arizcun